

Los corredores son áreas, generalmente alargadas, que conectan dos o más regiones. Pueden ser franjas estrechas de vegetación, bosques ribereños, túneles por debajo de carreteras, plantaciones, vegetación remanente o grandes extensiones de bosques naturales.
(Conabio, 2016).
Los corredores mantienen la continuidad de los procesos biológicos. Uno de los más importantes para la conservación es el proceso de dispersión de los individuos.
Los corredores permiten el movimiento y colonización de los individuos con lo que se previene la extinción local de poblaciones, se mantiene el flujo genético, se reduce la consanguinidad y se conserva la diversidad de especies en los fragmentos. (CONABIO, 2016)

Un ejemplo de esto es el Corredor Biológico Mesoamericano; que conecta Áreas Naturales Protegidas en México por medio de estrategias sustentables de aprovechamiento y conservación.

¿y si traducimos eso a nuestras ciudades?
A pequeña gran escala, éstos corredores conectan áreas habitables para animales grandes como jaguares, venados , tapires, para herbívoros que dispersan semillas y por lo tanto, colonización de plantas a nuevos sitios; y claro, para los polinizadores es más sencillo refugiarse y moverse en corredores que en una matriz inhóspita.
